Los Hombres De Las Flores de Arabia Saudita son descendientes de los antiguos Tihama y Asir, guerreros feroces, tribus solitarios y amantes de los sombreros florales.
En Arabia Saudita en Jizan y Asir, las provincias del sur de Arabia Saudita, viven los solitarios Hombres de las Flores. Habala es un pequeño pueblo de montaña en la provincia de Asir de Arabia Saudita, cerca de la frontera con Yemen.
Durante siglos, una comunidad tribal conocida como “hombres de las flores“, debido a su costumbre de llevar coronas de flores y hierbas secas en el pelo, cultivó y crió ganado en su asentamiento en lo alto de un acantilado. Accesible solo por una escalera de cuerda, el “pueblo colgante” se transformó en 1992 cuando el gobierno saudí construyó un teleférico y una carretera que permitía a los turistas acceder a las casas de adobe y las vistas panorámicas de Habala.
Después de violentos enfrentamientos con la policía saudí, los hombres de las flores fueron reubicados por la fuerza en una aldea moderna construida para ellos en el valle de abajo. Hoy en día, algunos de los habitantes originales pueden regresar al pueblo, pero solo para realizar sus bailes tradicionales para los veraneantes.
A finales de 2011, Eric Lafforgue, un fotoperiodista francés que pasó años documentando las comunidades marginadas de todo el mundo, viajó a la provincia de Asir con una escolta policial.
“Usan las flores por muchas razones, la belleza es importante. También es una forma de refrescar la mente y oler bien. Y es bueno para el dolor de cabeza, algunos incluso se ponen flores y hierbas en la nariz cuando tienen un resfriado. Pero lo principal es verse bien”.
Durante siglos, estos descendientes de las antiguas tribus Tihama y Asir han sido conocidos por llevar coloridas guirnaldas de flores en la cabeza. Vivieron completamente aislados hasta hace 20 años; sus aldeas no tenían electricidad ni caminos pavimentados y vivían de acuerdo con las leyes tribales tradicionales.
Incluso hoy, los Hombres de las Flores se mostraron reacios a que les tomaran fotos o incluso a conocer a extraños. Disfrutan de su forma de vida pacífica y del margen de autonomía que se les da. Son las únicas tribus de Arabia Saudita a las que se les permite cultivar y consumir khat, una droga estimulante. La posesión de drogas se castiga con la pena de muerte en el reino.
Los Hombres de las Flores también se aferran fuertemente a su tradición de decoraciones florales como una forma pacífica de diferenciarlos. La comunidad se extiende a través de la frontera hacia Yemen, un país al que la coalición liderada por Arabia Saudita está atacando con ataques aéreos.
La región montañosa se ha vuelto popular y atrae a muchos turistas locales de las tierras bajas. Cultivan café en las terrazas, pero también khat. Los Hombres de las Flores también se pueden encontrar al otro lado de la frontera: en Yemen. Debido a que sienten un fuerte parentesco con la gente de Yemen, la guerra allí hace que la gente se sienta infeliz. El conflicto también afecta la economía local y trae muchos refugiados a Arabia Saudita.
Los Hombres de las Flores no usan el tradicional shemagh o ghutra (tocado), sino que adornan sus cabezas con hermosas y perfumadas coronas de flores frescas. A veces, los Hombres de las Flores comparten imágenes de sus coronas en plataformas de redes sociales como Instagram. Van al mercado temprano en la mañana, para comprar coronas confeccionadas. Algunos prefieren seleccionar sus propias hierbas y flores, preparando las guirnaldas ellos mismos, para una apariencia única. Las hierbas como la albahaca silvestre, el fenogreco y las flores de caléndula son las más populares.
Las cosas empezaron a cambiar con la construcción de una vía de teleférico en la década de 1990 que permitió el acceso a las aldeas remotas de los Hombres de las Flores. Pero las tradiciones siguen siendo fuertes con los mayores. Este es un pueblo que estuvo habitado por los Hombres de las Flores hasta la década de 1980. Algunas de las estructuras tienen más de 200 años.
Los Hombres de las Flores están ansiosos por conservar su tradición de decoraciones florales como una forma de diferenciarlos de otras provincias. Los hombres que renuncian a sus coronas mantendrán su cabello largo como parte de la cultura local. A pesar de su amor por las flores, las tribus son famosas por sus habilidades de combate y su carácter fuerte.
Las flores se eligen cuidadosamente para que estén en armonía con la vestimenta tradicional de la tribu, la futa. Hace unos años, las futas fueron tejidas por hombres en el pueblo yemení de Bayt al Faqih. Ahora, deben importarse de la India. Las coronas se usan no solo para embellecer, sino que se cree que también curan los dolores de cabeza.
Las coronas y las guirnaldas son un accesorio de todos los días, pero la gente tiende a guardar sus tocados naturales más elaborados para el Ramadán y las bodas. También usan la daga tradicional llamada jambiya. Las coronas más elegantes están hechas con un tipo de jazmín blanco que es tan frágil que los vendedores tienen que guardarlo en neveras. Una corona como esta se puede usar durante dos días.
Fuente: https://www.aljazeera.com/
ARABIA SAUDITA
Arabia Saudita es el país más grande de la península arábiga y tiene la mayor economía del mundo árabe.
JAMBIYA, La DAGA YEMENÍ
La daga Yemeni conocida localmente jambiya (khanjar) es un legado popular y bello, que el hombre yemení lleva al rededor de su cintura con orgullo. Tanto hombres adultos e incluso algunos adolescentes, todavía usan la daga árabe tradicional llamada jambiya.
Shemagh, Kufiya, Al-hatta o Turbante Árabe
Es considerado como uno de los más bellos y varoniles tocados del mundo. En la vida diaria, el turbante fue muy útil para protegerse de la arena del desierto, así como para aminorar los efectos de las altas temperaturas y la intensidad de la luz solar.
YEMEN
Yemen tiene las tierras más fértiles que las de los otros países del medio oriente, con una buena agricultura en la zona oriental, donde llueve regularmente.
